Páginas de Demetrio Calle Martínez

 

VIAJE A FUERTEVENTURA

He incluido en este Cuaderno de viaje aquellos lugares que considero de más interés y que son imprescindibles para un completo conocimiento de la isla. En la descripción sigo un recorrido de norte a sur para facilitar la localización de los espacios en el texto. En el caso de los espacios naturales, aparecen enlaces al documento de declaración como tal y a las normativas que desarrollan su nivel de protección. Esta información la he extraído de la web del Gobierno de Canarias.

Si solamente queréis acceder a las fotos del recorrido por Fuerteventura pulsad aquí.

Si os interesan las fotos de la naturaleza de la isla pulsad aquí. Hay un resumen fotográfico amplio.

Si os interesan los recorridos por la isla (con coordenadas GPS) acceded aquí. He incluido un total de 9 recorridos por la isla.

CORRALEJO

Se trata del centro turístico más al norte de la isla.  Se accede por la carretera FV-1. Es digno de visitar el casco antiguo y el paseo marítimo. El primero está lleno de restaurantes, bares, heladerías y tiendas de todo tipo, aunque la mayoría están dedicadas a los deportes acuáticos. El paseo marítimo es una sucesión de pequeñas calas de arena. En el puerto hay una gran actividad y desde él salen los transbordadores a la cercana isla de Lobos y a Lanzarote. En la costa se encuentran playas espectaculares con numerosas calas y espigones.

Parque Natural de Corralejo

Extensión: 2668,7 hectáreas. Municipio: La Oliva Costa. Altitud máxima: Montaña Roja, 312 m. El parque Natural de Corralejo está situado en el norte de la isla y lo atraviesa de norte a sur la carretera FV-1 que dispone de varios sitios donde aparcar para  observar tranquilamente el paisaje. Comprende campos de dunas de gran interés científico formados a partir de yacimientos marinos de arena empujados por las corrientes marinas y el viento, un sector de lavas llamado malpaís y un cono volcánico, la Montaña Roja (312 m). Sus playas son la delicia para los aficionados al surfing y katesurfing.

 

Entre sus valores naturales destaca una variada flora con especies como la uvilla (Zygophyllum fontanesii),  la brusquilla o mato moro (Suaeda vera), el balancón (Traganum moquinii), el cebollín estrellado de jable (Androcymbium gramineum psammophilum), protegido por normativa regional, y otras muchas especies perfectamente adaptadas a la climatología isleña. En cuanto a la fauna, en este parque natural podemos disfrutar de la mejor población de hubara canaria (Chlamydotis undulata fuertaventurae), la mayor ave de la isla. No es raro encontrar en las dunas a la cabra majorera.

Protección: fue declarado por el Real Decreto 3058/1982, de 15 de octubre, que crea el Parque Natural de la Dunas de Corralejo e Isla de Lobos y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como parque natural. Este espacio junto con el islote de Lobos ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

ISLOTE DE LOBOS

El islote se encuentra al norte de la isla de Fuerteventura separado por un estrecho brazo de mar. Se puede ir a él tomando los barcos que salen desde el muelle de Corralejo varias veces al día. La travesía no dura más que unos 20 minutos. Actualmente está habitado por muy pocas personas. Es conveniente llevar agua y comida pues en el islote sólo hay un restaurante y casi siempre se encuentra lleno (hay que reservar, aunque también os pueden preparar pescado con papas arrugás y mojo, para llevar).

El islote de Lobos, aunque muy pequeño, es un paraíso natural. Todo él es un Parque Natural. En el siglo XV, estaba habitado por focas monje (Monachus monachus) lo que convirtió a este lugar en un sitio de interés científico. En la actualidad ya no queda ninguna foca pero mantiene poblaciones de unas 130 especies vegetales y gran variedad de animales, especialmente aves acuáticas. Merece la pena restringir al máximo las actividades humanas para preservarlo siempre. Podéis disfrutar de su naturaleza recorriéndolo a pie o en bicicleta.

 

Ruta senderista por el islote

Hay un sendero señalizado que parte del muelle y va hasta el Faro de Lobos, en la otra punta del islote. Se puede volver por la ruta que va por el lado contrario completando así un itinerario circular. Del faro parte el sendero GR-131 que atraviesa todo el islote y va hacia la punta de Jandía, en el sur de Fuerteventura.

La ruta a la que me he referido, y que voy a describir, se encuentra perfectamente señalizada en todo su recorrido. Partimos del pequeño muelle. Frente a él encontramos el Centro de Visitantes del Parque Natural (abierto sólo hasta las 15,30 h). Sencillo pero interesante. Hay paneles explicativos de la geología y fauna del islote y de algunas actividades humanas que se han realizado en él. A escasos cinco minutos hacia el este encontramos El Puertito, el único núcleo poblado, con ocho o diez casitas de estilo majorero. Algunas se alquilan a los visitantes. Siguiendo la ruta hacia el norte, es preciso detenerse en el paraje protegido de “Las Lagunitas”, donde podréis admirar muchas aves acuáticas. Además tiene un gran interés botánico. Se recomienda no salir del sendero principal para no molestar a las aves y para preservar las plantas. Es una zona preciosa. Seguimos adelante entre campos de lavas y llegamos a “Punta Martillo” donde está el Faro de Lobos, en el punto norte del islote.  Desde aquí la vista de Lanzarote y Fuerteventura es espectacular. A la vuelta, podréis parar en la base de la montaña Caldera y apreciar el  paisaje volcánico. También tiene inmejorables vistas desde la cima a la que se puede ascender por un pequeño sendero bien marcado.

Si os habéis atrevido a subir, seguro que estaréis cansados de tanto sol y os vendrá muy bien un chapuzón en la cercana playa de la Concha, ya muy cerca del muelle de donde hemos partido. La ruta circular total no dura más de una hora y media (sin contar paradas y la subida a la montaña Caldera). Aunque es una ruta muy fácil y corta, es muy recomendable llevar abundante agua y protección solar. No existe una sola sombra en todo el islote.

Como final, y mientras esperáis el barco de vuelta a Corralejo, os recomiendo un baño en la calita de aguas transparentes de El Puertito, mientras veis como pescan o preparan el pescado los escasos habitantes del islote. También podéis ver cómo se disputan los restos de la limpieza del pescado las gaviotas y los peces. Casi siempre ganan las gaviotas.

 

Parque Natural Islote de Lobos

 

Extensión: 467,9 hectáreas. Municipio: La Oliva Costa. Altitud máxima: Montaña de la Caldera, 127 metros. La especial característica insular de Lobos impone una clara delimitación natural a este islote con un alto contenido paisajístico, singular y representativo de la geología y geomorfología insular. Alberga hábitats muy valiosos, en magnífico estado de conservación donde no faltan endemismos, especies exclusivas o yacimientos paleontológicos. Destaca la presencia de la siempreviva endémica (Limonium ovalifolium canariensis). Además, buena parte de su flora está actualmente protegida por varias normativas.

Declaración: fue declarado por el Real Decreto 3058/1982, de 15 de octubre, que crea el Parque Natural de la Dunas de Corralejo e Isla de Lobos y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural.

Otras protecciones: este espacio junto con las Dunas de Corralejo ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

LA OLIVA y SU ENTORNO

La Oliva

En la localidad de La Oliva destacan sobre todo su iglesia, dedicada a la Virgen de la Candelaria, con una bonita torre de lava y basalto, la fortaleza del siglo XVIII llamada la Casa de los Coroneles, que fue residencia de los gobernadores militares durante el siglo XIX, y el Museo de Arte Canario con una amplia exposición artística.

Entre los principales espacios naturales y culturales del entorno de La Oliva encontramos:

Monumento Natural del Malpaís de la Arena

Al norte de La Oliva. Se accede por la carretera FV-101. Extensión: 870,8 hectáreas. Municipio: La Oliva. Altitud máxima: Volcán de la Arena, 420 metros. Este es un monumento natural que se originó por la actividad volcánica ocurrida desde hace 10.000 años. Entre sus restos de lava, habitan las mejores poblaciones de tarabillas (Saxicola dacotiae), y crecen las tabaibas (Euphorbia obtusifolia), aulagas (Launaea arborescens), verodes (Kleinia neriifolio)  y la cuernúa o chumberilla de lobo (Caralluma burchardii), protegida por normativa regional,  así como varios grupos de líquenes.

El conjunto del volcán y lavas de la Arena son una unidad geomorfológica definida de interés científico, geológico, geomorfológico y de alto valor estético por su carácter de elemento identificador del paisaje. Las lavas y laderas del cráter menos pobladas por la vegetación son una excelente muestra de hábitat eólico, con especies de invertebrados características.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de Malpaís Grande y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: Este espacio es área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

Acantilados y playas de El Cotillo

Al noroeste de La Oliva. Se accede por la carretera FV-10. Al llegar a esta pequeña pero preciosa población costera podemos dirigirnos a su resguardado muelle y desde allí caminaremos por sus amplísimas playas o por los acantilados cercanos. Se puede visitar el torreón llamado “El Tostón”, una torre de vigilancia del siglo XVIII, hoy convertida en centro de exposiciones. Antes de llegar a El Cotillo os recomiendo una parada en la población de Lajares, famosa por su artesanía, especialmente los encajes. Está enclavada al pie de la montaña Las Coloradas. Podéis visitar su ermita dedicada a San Antonio de Padua. En algunos de sus cafés podréis probar también su deliciosa repostería.

Monumento Natural Montaña de Tindaya

 

Al suroeste de La Oliva. Se accede por la carretera FV-10 y se toma el desvío  a la localidad de Tindaya. Extensión: 186,7 hectáreas. Municipio: La Oliva. Altitud máxima: 401 metros. Se originó a partir del complejo basal del macizo Betancuria. De gran interés arqueológico, la montaña de Tindaya tuvo un significado mágico y ritual para los antiguos aborígenes majoreros. En la cima pueden verse los mejores dibujos podoformes del archipiélago canario. La montaña de Tindaya es el resultado de un proceso de intrusión de materiales antiguos que han quedado al descubierto por intensos procesos erosivos. Su ubicación la hace visible desde múltiples puntos del norte de Fuerteventura, y reconocible por su peculiar forma, cromatismo y belleza paisajística. Constituye pues una estructura geomorfológica de gran importancia científica, al tiempo que un punto de interés cultural por sus valores arqueológicos. Cuenta además con la presencia de algún endemismo raro como la cuernúa o chumberilla de lobo (Caralluma burchardii) protegida por normativa regional.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de Montaña Tindaya y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

Montaña Quemada y Monumento a Miguel de Unamuno

Al sur de Tindaya, casi en la confluencia de la carretera FV-207 y FV-10, encontramos la montaña Quemada y en su pie un monumento en piedra a Miguel de Unamuno que vivió exiliado en esta isla durante cuatro meses, en 1924, oponiéndose al régimen del general Primo de Rivera.

Paisaje Protegido de Vallebrón

Al sur de La Oliva. Se accede por la carretera FV-10 y FV-103. Extensión: 1.679,6 hectáreas. Municipios: La Oliva y Puerto del Rosario. Altitud máxima: Montaña de la Muda, 689 metros.  Se ve como un lomo alargado y con los relieves de un cuchillo flanqueado por dos grandes barrancos en forma de U. El vértice más oriental, que corresponde a la montaña de la Muda, alberga un yacimiento con sistema de enterramiento muy peculiar. Vallebrón representa una unidad geomorfológica de relieve en cuchillo característica de Fuerteventura, de gran belleza y valor paisajístico, alberga el vértice de la Muda, que con sus 690 m es una de las mayores alturas de su entorno, constituyendo un punto de referencia de importancia para el territorio que ocupa.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de Laderas de Vallebrón y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como paisaje protegido.

 

Villaverde y Cueva del Llano

Al norte de La Oliva. Se accede por la carretera FV-101. El desvío a la cueva de los Llanos está indicado en la carretera, saliendo de Villaverde, en dirección norte, a la izquierda. En Villaverde podemos ver los típicos molinos de viento tradicionales de la isla. Para visitar la cueva del Llano hay guías que hacen el recorrido (muy sencillo y apto para todos) de unos 600 metros (ida y vuelta) que dura aproximadamente 40 minutos. La cueva es un antiguo tubo volcánico y su interés científico principal reside en que la habitan milimétricos opiliones (parecidos a arañas) ciegos y transparentes, endémicos de este lugar. Se les denomina en el ámbito científico Maiorerus randoi. Dentro de la cueva podéis hacer fotos pero no llegaréis hasta donde habitan lo opiliones pues es zona restringida. También podéis visitar el sencillo pero interesante centro de visitantes de la cueva. En este enlace podéis acceder a la colección fotográfica que realicé en la cueva y en el centro de interpretación.

Tefía y Ecomuseo de la Alcogida

Al sur de La Oliva. Se accede por las carreteras FV-10 o FV-20 y la FV-207. Se trata de un bonito caserío rehabilitado como ecomuseo agrícola y ganadero que nos informa de los usos y costumbres populares de los isleños. Las casas que lo componen se encuentran a ambos lados de la carretera. Algunas están habilitadas como talleres donde se pueden adquirir obras de la artesanía canaria. Acceded a la colección de fotos del ecomuseo aquí.

 

PUERTO DEL ROSARIO y ZONA SURESTE

Puerto del Rosario

Es la capital de la isla, aunque no es la población más apreciada por el turismo, que prefiere desplazarse al norte (Corralejo) o al sur (Jandía). Ciudad moderna con numerosos edificios de estilo africano en forma de cubos. Podemos destacar, en la plaza principal, la iglesia del Rosario y, muy cerca, el Museo Miguel de Unamuno, instalado en la vivienda que el escritor habitó durante su estancia en la isla en 1924. También se puede visitar el Centro de Arte Contemporáneo Juan Ismael. Después del recorrido, merece la pena un paseo por el muelle pesquero y probar el suculento pescado fresco de los restaurantes que hay a su alrededor.

Caleta de Fuste

Al sur de Puerto del Rosario y del aeropuerto. Es un centro turístico donde se puede ver un torreón (castillo) del siglo XVIII catalogado como bien de interés cultural. Tiene cerca bonitas playas y numerosos hoteles, restaurantes, supermercados y todo tipo de servicios. Es un buen sitio desde donde partir para recorrer la isla dada su situación, en la costa central. De aquí parte el sendero de la Guirra que os llevará, en dirección sur, hasta las salinas del Carmen y el Museo de la Sal.

Monumento Natural de la Caldera de Gairía

Se accede a esta montaña desde las carreteras FV-20 y FV-50 aunque por su tamaño y forma es perfectamente visible desde bastante lejos. Se trata de un cono volcánico de interés paisajístico, geológico y geomorfológico. Posee interés científico al tratarse de una manifestación eruptiva reciente y por tener interesantes comunidades vegetales de zonas áridas.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de Caldera de Gairía y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

Paisaje Protegido del Malpaís Grande

Este espacio está comprendido entre las carreteras FV-20 y FV-50. Extensión: 3.245,3 hectáreas. Municipios: Antigua y Tuineje. Altitud máxima: Caldera de los Arrabales, 243 metros. Atravesando este lugar podréis captar maravillosas fotografías. Se trata de un malpaís impresionante que hasta ahora ha sido respetado por la mano humana. Por su cielo se puede divisar el vuelo majestuoso del guirre (Neophron percnopterus) y en sus lavas pastan multitud de cabras y ovejas. El campo de lavas del Malpaís Grande y su entorno configuran un paisaje representativo de llanuras donde las coladas que derramaron por el barranco de Pozo Negro ejemplifican un típico fenómeno de construcción de relieve, que desarticula la estructura anterior del territorio y se renueva por posteriores emisiones volcánicas.

Declaración: este espacio forma parte del que fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural de Pozo Negro y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como paisaje protegido.

Otras protecciones: este espacio ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Con la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias se establece un sector de las coladas de los malpaíses como área de sensibilidad ecológica.

Poblado aborigen de La Atalayita

Uno de los sitios más atractivos para visitar en esta zona es el poblado aborigen de la Atalayita, uno de los primeros asentamientos de los Mahos, tribus bereberes a los que se considera como los primeros pobladores de Fuerteventura. En el poblado hay un centro de interpretación que cuenta, entre otras cosas, este trozo de historia canaria. Durante mi estancia en él pude realizar esta colección de fotos que espero os resulten interesantes. Si tenéis ganas de andar, al terminar la visita del poblado, podéis ascender al pequeño cerro de La Atalatiya por un sendero bien marcado.

 

Monumento Natural de los Cuchillos de Vigán

Esta zona tiene una superficie de 6090 hectáreas. Los cuchillos representan unidades geomorfológicas características, de gran belleza y singularidad. Destaca el monte Vigán, con 462 m. Son además un importante reducto donde se refugian el guirre (Neophron percnopterus), el águila pescadora (Pandion haliaetus) y el halcón de Berbería (Falco pelegrinoides), tres de las rapaces más amenazadas de Canarias. Entre la flora destacan endemismos de gran valor científico y reducida distribución. Alberga además enclaves de fauna fósil marina de gran interés científico.

Declaración: este espacio forma parte del que fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural de Pozo Negro y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: este espacio ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

Desde aquí podemos visitar los pequeños poblados de Las Playitas y, algo más al norte, Pozo Negro, con sus preciosas calitas y ensenadas. También os podéis acercar, por una carretera muy empinada y con bastantes curvas peligrosas, al Faro de la Entellada, desde donde apreciaréis unas vistas excepcionales de la zona de los Cuchillos.

Toda la zona comprendida entre Pozo Negro y Gran Tarajal, es digna de ser recorrida despacio para poder descubrir numerosos rincones asomándose al mar.

 

BETANCURIA y ANTIGUA

Podéis acceder a una colección de fotos de estas dos poblaciones y de su entorno aquí.

Betancuria

Es una población declarada Monumento Histórico Artístico. Fue fundada en 1404 por el conquistador normando Jean de Béthencourt. Fue capital de Fuerteventura hasta 1834. Es una delicia pasear por sus pequeñas calles. Descubriréis pronto la iglesia catedral de Santa María de Betancuria en la plaza principal. La iglesia fue construida inicialmente por los normandos en estilo gótico. La destruyeron los bereberes y fue reconstruida en el siglo XVII. Frente a ella, al otro lado de la plaza, encontraréis la casa de Santa María, una mansión del siglo XVI. Junto a la ermita de San Diego se encuentran las ruinas del Convento de los Franciscanos.

Saliendo de Bentacuria, en dirección a Antigua, podéis hacer una parada en el mirador de Morro Velosa, con bonitas vistas a los dos valles, el de Betancuria y el de Santa Inés. En el puerto, hay dos monumentos a los reyes guanches Guize y Ayose, que se disputaban continuamente el territorio majorero cuando llegaron los conquistadores normandos.

Antigua

Es un centro agrícola y artesano que fue fundado por familias de colonos normandos, castellanos y andaluces. Es bonita su iglesia, del siglo XVIII, y el Centro de Artesanía Molino de Antigua, donde se muestran los trabajos de los artistas locales, principalmente ropa y encajes. El interior del molino, perfectamente restaurado, puede visitarse. El exterior dispone de jardines muy bien cuidados donde se cultivan la mayor parte de las plantas típicas de la isla.

Una bonita ruta que une estas dos históricas poblaciones majoreras con preciosas vistas del Parque Rural de Betancuria, podéis descargarla en este enlace (con coordenadas GPS).

Desde Betancuria a Pájara, por la carretera FV-30, se atraviesa Vega de Río Palma, donde merece la pena hacer una parada para ver su bonita iglesia de Nuestra Señora de la Peña, patrona de Fuerteventura.

 

Parque Rural de Betancuria

 

En una extensa zona de 16.544,3 hectáreas de extensión.  Municipios: Betancuria, Puerto del Rosario y Pájara. Altitud máxima: Montaña de Betancuria 742 metros. La denominación de "parque rural" se asocia a lugares con tradición agrícola y ganadera que tienen como entorno un espacio natural de características únicas. En el caso del parque rural de Betancuria destaca por su interés morfológico y geológico, un paisaje profundamente erosionado por los vientos y las manifestaciones volcánicas. Protegible por su singularidad geológica y su morfología paisajística. Casi todo el parque coincide con los afloramientos del complejo basal de Fuerteventura, que ocupan la franja oeste de la isla, lo cual no sólo le confiere un excepcional interés científico sino que además, impone una peculiaridad cromática y estructural a toda su superficie. En su conjunto, se trata de un paisaje de gran belleza  adornado en todo momento por elementos singulares que caracterizan el paisaje de la zona (barrancos, lomos,...). En los peñascos y macizos montañosos se refugian muchas plantas rupícolas, con varias especies amenazadas y protegidas. No faltan las especies introducidas como el gandul o tabaco moro (Nicotiana glauca), o incluso pequeñas poblaciones de pinos en las inmediaciones de Betancuria. Por otro lado, hábitats particulares como el humedal de las presas de las Peñitas y los Molinos, presentan gran interés faunístico y los acantilados costeros y de interior sirven de refugio a varias rapaces amenazadas.

Vegetación de matorral de aulagas y plantas espinescentes, que se completa con los palmerales y tarajales del barranco de las Peñitas. El Morro de la Cruz presente una inusual riqueza florística, de especies rupícolas  (tabaiba dulce, jorada, etc.).

Los humedales de la presa de las Peñitas o Los Molinos es el hábitat de la polla de agua (Gallinula chloropus) y de la focha común (Fulica atra). El Barranco de Ajuy-Las Peñitas acoge nidos de guirres (Neophron percnopterus) y la costa permite verificar la existencia de nidos de águilas pescadoras y colonias de pardelas.

Existen restos de sedimentos marinos del Puerto de la Peña y de civilización indígena.

En su interior se encuentra el monumento natural de Ajuy, del que hablaré a continuación.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural de Betancuria y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como parque rural.

Otras protecciones: este espacio ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Cuenta también con dos montes a cargo del Patrimonio Forestal del Estado "Castillo de Lara" y "La Costa".

 

Monumento Natural de Ajuy

 

Se accede a Ajuy por la carretera FV-621 desde Pájar o desde Betancuria. Extensión: 31,8 hectáreas. Altitud máxima: 68 m. Este es el lugar más antiguo del archipiélago canario y, en consecuencia, el espacio que primero emergió como consecuencia de las erupciones del volcán submarino que originó el  Archipiélago. Algunas rocas de este de este monumento natural son sedimentos marinos pertenecientes a la época de los dinosaurios. El estudio de las arenas de cuarzo y de los fondos marinos le otorga una antigüedad superior a los 100 millones de años, correspondiendo a la época del cretácico.

Aún podemos encontrar zonas que datan de los tiempos en que África y América comenzaban a separarse, momentos en que ni siquiera las Islas Canarias habían comenzado su proceso de formación. Alberga este espacio un depósito de materiales antiguos de extraordinario interés científico, en el que están presentes sedimentos oceánicos y fósiles de animales marinos ya desaparecidos. Contiene además formas heredadas de otros tiempos modeladas en condiciones ambientales diferentes a la actuales que destacan en conjunto como elementos singularizado de gran belleza. Se han detectado restos fósiles de moluscos y de pardelas de una especie ya extinguida (Puffinus holei).

Un interesante sendero nos lleva por lo alto de los acantilados y podremos apreciar los estratos y dunas fósiles que nos cuentan la historia geológica de la isla. El sendero, muy fácil de recorrer, está perfectamente señalizado y se tardan sólo veinte minutos en hacerlo. Podremos descubrir mientras andamos unos antiguos hornos de cal y un embarcadero, que fue muy importante en otros tiempos. Aquí fue donde desembarcaron en 1402 los conquistadores normandos de Fuerteventura. La ruta termina en la Cueva Negra, una profunda oquedad originada por las erupciones y la acción del mar, desde donde se observan excepcionales vistas.

Esta ruta la podéis descargar en este enlace.

Declaración: este espacio forma parte del que fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural de Betancuria y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: este espacio al estar dentro del antiguo parque natural de Betancuria ha sido declarado zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres. Es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

Valle de Santa Inés y Playa del Valle

En el recorrido por estos dos enclaves podréis apreciar algunos elementos clásicos del Parque Rural de Betancuria, tales como cauces secos de arroyos con vegetación característica, barrancos, granjas ganaderas y playas solitarias. Es un recorrido muy bonito y corto que podéis descargar aquí (con coordenadas GPS).

Algo más al norte, por la FV-207 y FV-221 podéis acceder al Barranco de los Molinos que termina en una preciosa playa solitaria con grandes rocas.

 

PÁJARA y PENÍNSULA DE JANDÍA

 

Pájara

Se encuentra en un valle entre las tierras altas de la isla. Se accede por la carretera FV-30. Podemos destacar la iglesia de la Virgen de Regla, de 1687, que contiene atípicas tallas de estilo azteca. Parece ser que el nombre le viene de un pueblo cubano al que emigraron varias familias de la isla en el siglo XIX.

En los 149 km de costa de este municipio se encuentran las mejores playas de la isla y posiblemente de todas las islas Canarias.

Parque Natural de Jandía

Extensión: 2.670 hectáreas. Altitud máxima: Pico de la Zarza, 807 metros. Es un Parque Natural de gran extensión. Se pueden localizar en él manifestaciones de casi todos los hábitats, así como imponentes paisajes entre los que podemos destacar el Arco de Cofete. Dentro de este parque natural se encuentra el pico más alto de la isla y entre las especies vegetales, podemos apreciar el cardón de Jandía (Euphorbia handiensis) que es una especie endémica y también el símbolo vegetal de Fuerteventura.

Jandía constituye una unidad estructural definida de destacada importancia geológica y biológica, y espectacular belleza paisajística. Superposición de coladas sálicas y básicas, con las máximas elevaciones de la isla y con un Arco de Cofete considerado como una de las panorámicas más espectaculares de Canarias. El arco rodea el Morro del Fraile, de 686 m, y tiene un mirador bajo el Roque de Moro (230 m). Desde lo alto del camino de acceso se ven las impresionantes coladas de lava y unas excepcionales vistas de las costas de barlovento. El viento aquí es fortísimo.

He elaborado una bonita ruta (con coordenadas GPS) que abarca gran parte del Parque Natural, desde el Saldar del Matorral, llegando al mirador de Cofete y bajando hasta la Punta de Jandía. La podéis descargar aquí.

Otra ruta, más amplia, que abarca el territorio del Malpaís Grande y parte del Parque Natural de Jandía, la podéis descargar aquí.

Su fauna y flora cuentan con abundantes endemismos, especies amenazadas y especies protegidas, que se distribuyen por hábitats bien conservados y a veces muy amenazados, siendo además el hábitat de algunas especies exclusivas. Un rico hábitat florístico y faunístico: subutícola (El Jable), halófilo, llanuras pedregosas, barrancos, vaguadas y cumbres. Plantas halófilas tales como la “uvilla de mar sahariana” y la uvilla, babosa o uva de mar (Zygophyllum gaetulum), a los que debemos unir otros endemismos tales como la “magarza de Jandía”, el “taginaste” y el cardón de Jandía (Euphorbia handiensis). Pequeños bosques de tarajales y palmeras, que completan un “rico espacio botánico”, como define a ésta península David Bramwell.

Una fauna riquísima entre las que destaca el guirre (Neophron percnopterus), el halcón de Berbería (Falco pelegrinoides), la hubara (Chlamydotis undulata fuertaventurae ) y la tarabilla (Saxicola dacotiae). Para las aves, representa un área de importancia vital, con especies protegidas por disposiciones internacionales (convenios de Berna y Bonn, directiva europea de Hábitats, etc.).

La existencia de importantes yacimientos de fauna marina del Cuaternario, entre los que destacan los referidos a especies de pardelas extinguidas hace más de 25.000 años (Puffinus holei).

En conjunto, Jandía configura un paisaje casi intacto e imponente, plagado de elementos naturales de gran valía, hasta el punto de representar una de las muestras más valiosas y peculiares de la naturaleza canaria.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Parque Natural de Jandía y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como parque natural

Otras protecciones: con la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias se establece un sector externo al Parque Natural y al sur de la Península de Jandía como área de sensibilidad ecológica. Este espacio ha sido declarado como zona de especial protección para las aves (ZEPA) según lo que establece la Directiva79/409/CEE relativa a la Conservación de la Aves Silvestres.

 

Monumento Natural de Montaña Cardón

Tiene una superficie de 1266,8 hectáreas. Este macizo de Montaña Cardón destaca por ser una estructura geomorfológica diferenciada y representativa de un relieve escarpado labrado por la erosión. Aporta recursos paisajísticos de importancia al ofrecer valores panorámicos, sobre todo en sus vertientes orientales, donde las montañas se elevan desde una llanura apenas provista de accidentes geográficos similares.

Su riqueza florística en especies rupícolas, algunas amenazadas y la mayor parte protegidas, le confiere además gran valor científico. Contiene especies importantes como la col de risco (Crambe pritzelli), el cerrajón (Sonchus acaulis), el cardón (Euphorbia canariensis) y jorga (esta última, endémica).

Área con importantes vestigios indígenas, que parecen corresponder al carácter religioso de ésta montaña.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de Montaña Cardones y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como monumento natural.

Otras protecciones: Este espacio es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico.

 

Sitio de Interés Científico Playa del Matorral

Se encuentra en Morro Jable, uno de los mayores centros turísticos de Fuerteventura. Tiene una superficie de 115,6 hectáreas. Alberga una buena representación del hábitat de saladar, a pesar de su deterioro en los últimos años. Su riqueza florística y su valor potencial como zona de recalada de aves marinas le confiere alto valor científico. La importancia científica de este espacio, a pesar de sus reducidas dimensiones, radica en ser un hábitat en regresión en todo el archipiélago. Conserva diferentes especies halófilas, tales como los matos moros (Suaeda vera), brusquilla (Discaria americana) y uvilla (Zygophyllum fontanesii).

Es un espacio que requiere una singular protección por ubicarse en una zona de playa muy visitada frente a  numerosas edificaciones turísticas.

Declaración: este espacio fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como Paraje Natural de Interés Nacional de El Saladar y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias como sitio de interés científico.

 

El Puertito y Faro de Jandía

Si recorréis Punta Jandía al completo, llegaréis al extremo final de la isla, donde se encuentra el Faro de Jandía. Este es el punto final del recorrido (sendero GR131) que, dentro de Fuerteventura, comienza en el islote de Lobos. Antes de llegar al Faro, encontraréis el pequeño poblado de El Puertito, lugar que aprovechan los dueños de caravanas para montar su propio lugar de estancia al lado del camino. Es un lugar donde se respira una paz y tranquilidad inmensas. Cerca está Morro Jable, una de las poblaciones turísticas de la isla, como ya he indicado.

 

Creo que con este recorrido global os podréis hacer una buena idea de lo que es Fuerteventura, quizás la más desconocida de las islas Canarias, pero no por ello menos espectacular y bonita. Espero que os despierte el interés por visitarla.

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©Demetrio Calle Martínez