Páginas de Demetrio Calle Martínez

 

ITINERARIO POR SIERRA CHIMENEA: DE FUENTE LA HIGUERA AL CAMORRO ALTO (Circular)

Datos del itinerario

Recorrido circular de 9,26 km que se puede hacer en cuatro horas (sin paradas) con un desnivel acumulado de 538 m.

Mapa 16-43 (1038), Ardales, del Servicio Geográfico del Ejército.

Localización:

 

Recorrido en Google Earth con datos GPS de localización.

Galería general de fotos del recorrido.

Montaje audiovisual de la excursión (Antonio Montero).

 

Accesos

Desde Antequera tomando la carretera al Valle de Abdalajís (A-343) y a unos 5 km de este cruce encontraremos a la izquierda una señal que nos indica dirección a La Joya y La Higuera (Km 0 de la MA-4402) y Ruta de la Escaleruela (SL - A22). Tomando esta carretera, a unos 4 km pasaremos por el Puerto de las Orejas de la Mula y un poco más adelante veremos a la derecha de la carretera la Fuente de la Higuera y las ruinas de un cortijo. Al otro lado de la carretera (a nuestra izquierda) veremos el carril que tomaremos (Carril de la Fuenfría) señalizado con un poste del sendero antes citado. Aquí podemos dejar los vehículos.

                                                        

Otra forma de acceso es a partir de Villanueva de la Concepción. A la salida de esta localidad en dirección Almogía, veremos a los pocos kilómetros un desvío a la derecha que indica La Joya, Los Nogales y La Higuera. Esta es la misma carretera mencionada antes y que nos lleva al mismo sitio pero desde el otro extremo.

Descripción del itinerario

 

 

Empezamos nuestra ruta a las 11,10 h dejando los coches frente a la alberca conocida como Fuente de la Higuera e iniciamos el recorrido por el Carril de la Fuenfría (mark 1, 895 m), que nos llevaría hasta los Cortijos de “La Fuenfría” y “El Navazo”. Este carril sólo lo vamos a usar en sus primeros quinientos metros a la ida y desde el cortijo de Fuenfría hasta los coches a la vuelta. También se pueden dejar los coches junto a una pequeña cantera situada a 200 m del comienzo del carril. Más adelante, a unos 300 m de la cantera, veremos en una pequeña colina cuatro encinas a la derecha del camino (mark 2, 933 m, 0,5 km de la salida). Aquí es donde abandonaremos el carril y tomaremos dirección Norte (a nuestra izquierda) bordeando un campo de cereal que se encuentra en la parte baja de la montaña. Si pudiésemos ver esta zona desde arriba veríamos que en realidad estamos andando sobre una falla que queda oculta por el terreno cultivado. Hay más de una falla y las podremos ver mejor a la vuelta, desde el camino que acabamos de dejar o bien desde la cresta de la sierra que ascenderemos a continuación. Frente a nosotros ahora vemos El Puntal (1066 m), por cuyo borde oriental ascenderemos, y más a la izquierda el Peñón de Vallejos (886 m). Ambos cerros forman el borde occidental de la Sierra de Chimenea.

 

         

 

                                   

 

Al bordear el campo de cereal vemos un pequeño arroyo que hay que cruzar (mark 3; 932 m; 0,8 km de la salida) y enseguida empieza el ascenso por la falda de la sierra. Debemos fijarnos en las trochas hechas por el ganado e ir ascendiendo sin perder de vista la cuerda, nuestro próximo destino. Este ascenso es duro pues en setecientos metros que recorreremos desde el arroyo nos colocaremos a 1125 m de altitud. Durante el ascenso nos encontraremos una  alambrada (mark 4; 1005 m; 1,2 km de la salida)  que hay que cruzar buscando el sitio apropiado que está desplazado hacia la izquierda según subimos. No es difícil atravesarla. Llegamos por fin a la cuerda de la sierra (mark 5; 1125 m; a 1,5 km de la salida) resoplando y parando un momento para reponer fuerzas pues la subida es bastante empinada. Desde la alambrada a la cresta hemos tardado 25 minutos en subir, incluyendo un breve tiempo de parada mientras cruzábamos todos. Son las 12 h. Desde aquí podemos ver, en la vertiente norte, la Vega de Antequera y la Laguna de Fuente Piedra, aunque como el día está neblinoso, a veces se pierden de nuestra vista. En cualquier caso, los paisajes son espectaculares. Si volvemos la vista hacia donde hemos venido, veremos el carril de la Fuenfría allá abajo, entre suaves lomas de color rojizo producto de las arcillas de descalcificación.

 

         

 

Ahora, desde el cordal, casi siempre iremos por la vertiente norte, al menos al principio. Después nos tendremos que cambiar a la vertiente sur, buscando siempre la mejor vereda entre las calizas y sin perder de vista la cuerda por la que seguiremos avanzando siempre en dirección Este. En realidad, no es fácil caminar sobre la cresta, por la dificultad que nos ofrecen los canchales. Más bien lo que estamos haciendo es faldear la cuerda. Aconsejamos seguir las trochas de las cabras en todo lo posible. Pronto llegamos a una vaguada con un bonito lapiaz (mark 6; 1175 m; 2,5 km desde el inicio), donde hicimos un alto para esperar a los rezagados (la fuerte subida anterior se está cobrando su precio). También aprovechamos para hacerle un arreglo “casero” a una de mis botas que parece que ya está pidiendo pasar a mejor vida después de tantos años y caminos recorridos. Antonio, que lleva una auténtica maleta de cosas útiles en su mochila, y Rafa, me hicieron el “arreglo” de lo que dejo constancia en las fotos.

 

                         

                   

               

Seguimos cresteando-faldeando subiendo suavemente en dirección Este hasta llegar a una segunda alambrada que hay que dejar cerrada al pasar (mark 7; 1195 m; 2,7 km de recorrido). A nuestra izquierda queda un camorro con estratos inclinados rojizos que no hay que confundir con el Camorro Alto, por supuesto. En esta zona hay tramos sin demasiadas rocas que contienen algún que otro bonito prado. Las vistas son fantásticas.

 

                         

 

Seguimos adelante y pasamos dos camorros a nuestra izquierda a los que nos acercamos (mark 8; 1280 m; 3,2 km desde el inicio). Son las 13,40 h. Desde aquí ya puede verse allá adelante el Camorro Alto. Se distingue muy bien porque sus laderas están muy karstificadas. Ahora empieza una suave bajada que nos lleva a un prado rodeado de paredes verticales e inmediatamente empieza la subida al Camorro Alto. En este momento, parte de los expedicionarios deciden que ya han disfrutado bastante del recorrido y prefieren buscar un sitio para comer e iniciar el descenso. Los llamaremos en adelante “Silver Team”. El resto decidimos esperar aún a la comida (y eso que el esfuerzo ya se deja notar) y acometer el ascenso final. Nos hemos llamado a nosotros mismos “Golden Team” por motivos obvios.

El “Golden Team” inicia el ascenso por la cara Oeste ladeando todo lo posible para aprovechar la menor inclinación (ver curvas de nivel en el mapa topográfico). También hemos ido siguiendo las sendas de las cabras por resultar más fácil que circular a través de la enorme cantidad de rocas karstificadas. Aun así hay que subir durante buen trecho por un extenso torcal con terreno muy dificultoso. En un determinado momento del recorrido nos acercamos al mismo borde norte de la cornisa para ver una enorme grieta con una caída de más de 300 m aún más espectacular si cabe por la niebla que casi la tapa en estos momentos.

 

                         

 

Seguimos ascendiendo con muchísimo cuidado por el mismo borde del cordal o salvando profundas grietas y pasadizos entre el torcal hasta coronar por fin el Camorro Alto con su punto geodésico (mark 9; 1377 m: 4,5 km desde el inicio). Son las 14,40 h, es decir, desde el último hito hemos tardado una hora aproximadamente. En los alrededores de la cima hay algunas cruces y placas de recuerdo a los montañeros que por aquí se aventuraron. Nos hacemos las fotos de rigor y nos abrigamos bien pues el frío en estas alturas se deja notar bastante.

 

                         

 

Abandonamos la cima descendiendo con cuidado (igual de peligroso que la subida) y damos con un pequeño prado (mark 10; 1345; 4,7 km de recorrido) donde decidimos parar para la comida pues ya no aguantamos más. En esta zona, concretamente en las calizas ammonitico rosso que abundan, hay fósiles de Ammonites y Belemnites. Rosa encontró un poco más abajo del prado, un ejemplar de cada tipo. Podemos observar abajo a nuestra izquierda El Navazo, una gran fractura entre montañas en cuyo fondo se construyó el cortijo del mismo nombre. Encima del Navazo, el impresionante Torcal. Hacia el otro lado, por donde vinimos, se ven muy bien los sistemas de fallas que se originaron durante el levantamiento de esta zona.

 

                         

 

Una vez respuestas las fuerzas seguimos descendiendo en dirección Sur durante los primeros centenares de metros para cambiar paulatinamente a la dirección Suroeste a medida que avanzamos. Es lo más cómodo. En esta dirección veremos la Sierra del Valle de Abdalajís con sus picos Huma y Capilla, al fondo. Durante el descenso, a unos 1240 m de altitud, veremos una bonita zona con calizas rojas estratificadas (mark 11; 1235 m; 5,2 km desde el inicio). Son las 15,55 h. Ahora seguimos dirección Oeste. Hay que buscar las veredas más fáciles, cosa que no entraña dificultad pues están bien marcas por el ganado. También hay señalizaciones con pequeñas rocas superpuestas que los senderistas han ido colocando. No es posible perderse en este descenso pues, además, durante gran parte del recorrido tenemos a nuestra vista el carril de la Fuenfría. Llegaremos a una nueva alambrada que se supera sin dificultad (mark 12; 1140 m; 6,2 km de recorrido). Son las 16,15 h.

 

                         

Ahora seguiremos nuevamente dirección Suroeste y pronto nos encontraremos con una cancela (mark 13; 1080 m; 6,4 km desde el inicio) que hay que dejar cerrada para evitar que el ganado se disperse por la sierra. Al pasar la alambrada veremos a nuestra derecha unos imponentes cortados donde se ven volar a los buitres. Aquí tienen instaladas sus buitreras. Ya sólo nos queda seguir bajando hasta llegar al cortijo de la Fuenfría (mark 14; 960 m; 6,8 km desde el inicio). Son las 16,35 h.

 

                         

Al salir del cortijo enlazamos con el carril de la Fuenfría y nos llevamos la agradable sorpresa que el “Silver Team” asoma por el carril y se une a nosotros formando de nuevo el “Platinum Team”, o sea todos los que iniciamos esta fenomenal excursión. Ellos han bajado por una zona más empinada, cercana al cortijo El Navazo, atravesando prados con vacas y ovejas, y han llegado al mismo carril aunque más al Este. Ya todos en el carril avanzamos en dirección Oeste hacia los coches. Justo enfrente del cortijo pudimos ver un abrevadero que en los mapas viene señalado como Fuenfría (fuente). El resto del recorrido por el carril permite ver a nuestra derecha la sierra por la que hemos transitado y los bonitos paisajes que desde aquí abajo también se aprecian, además de las fallas a las que antes he aludido.

 

         

         

Tras 2,3 km por el carril cerramos el itinerario llegando a los coches a las 17,20 h. Así pues, en total la ruta tiene 9,11 km y ha durado 6 horas y 10 minutos incluyendo las paradas y el rato de la comida. A nadie ha dejado indiferente pues es una ruta de las que podemos denominar sin dudarlo “de pata negra”. Os animamos a hacerla.

 

                       

© Demetrio Calle Martínez